sábado, 26 de septiembre de 2015

¿Cuál es el origen de esto?

AMS= Atracción hacia el Mismo Sexo

Hace algunos días estuve reflexionando mientras iba en la micro camino a mi iglesia y recordé ciertos eventos en mi infancia que me hacen ver por qué terminé desarrollando ciertas atracciones indeseadas.

Como dijo un hermano en la fe, quien tiene la misma lucha, la AMS es un síntoma, no mi identidad. Es un síntoma de necesidades no cubiertas, necesidades que el mundo nos engaña diciéndonos que sólo siguiendo nuestros deseos seremos realmente felices pero el problema es que eso es una absoluta farsa, nunca nos sentiremos plenos. El único ser que puede llenar todo vacío y satisfacer toda necesidad es Jesucristo.

Entonces, ¿qué necesidades no fueron cubiertas durante mi infancia y que desde la pubertad se "erotizaron"? Esa es la gran cuestión. Mis padres nunca han sido completamente rendidos a Dios, mi padre por lo menos. Mi madre siempre ha sido muy cariñosa conmigo, tierna, amable, respetuosa, atenta, etc, (soy su hijo único). En cambio, de parte de mi padre soy su hijo menor y también ha sido siempre cariñoso conmigo, pero no tan atento ni amable, a veces. Entonces, no logro entender cómo se desarrolló en mi esa necesidad o falta de afirmación masculina. Quizás fue mi inconformidad con el patrón socialmente aceptable de "varón" (deportista, rudo, seguro, etc) porque siempre fui malo para los deportes, inseguro, miedoso, reflexivo, más sensible, etc.Creo que sólo Dios y quizás un sicólogo podría saber la respuesta.

Mientras reflexionaba y miraba mi pasado, recordé que desde pequeño he tenido actitudes y pensamientos caníbales, esos pensamientos en los que te sientes falto de algo y comienzas a compararte con otros. Así, desde niño recuerdo que si veía a un compañero o incluso un loco de la TV que era más "masculino" o que era más choro, o más "lindo" (aún sin deseo sexual, pues era un niño) o más esto u esto otro que yo, tendía a compararme con ese tipo.

Alrededor del año 2008 (tenía como 10 años) tuve un "amigo" en mi barrio con el que jugaba pero él me trataba super mal, me insultaba y humillaba seguido pero yo siempre lo escondí y no sólo eso: a pesar de que me hacía sentir mal, yo lo seguí considerando un "amigo", Seguí jugando con él y permitiendo que me humillara en la manera en que lo hacía. En mi mente recuerdo que sentía que si no estaba junto a él no valdría nada, me había vuelto un dependiente emocional de alguien que me humillaba. ¿Por qué? Porque era más choro, porque era más "macho", porque era ese prototipo de "masculinidad" que impone la sociedad y que, por lo tanto, provocaba en mi pensamientos caníbales, deseos de ser como él pues yo no me sentía bien conmigo mismo. Finalmente, después de meses, fui capaz de alejarme de él y un día se fue del barrio. Nunca más supe de él.

¿Por qué no me aceptaba masculino? ¿por qué siempre me sentía carente de tal y tal cosa que me haría ser más "masculino? No lo sé. Pero lo que sí se es que una ves entré en la pubertad y comenzó el "despertar sexual" esas necesidades se erotizaron y comencé a sentir AMS.

Primero fueron miradas lujuriosas, luego pornografía (una transición desde la hetero a la homosexual, cuando me empezó a atraer más) que me terminó haciendo adicto.

¡Gloria a Dios! Porque Él me libró , porque su poder se manifestó en mi, tuve un encuentro con mi Creador y Salvador y transformó mi vida. No podía seguir igual. Vino a ser la respuesta al por qué de todo sufrimiento. Ahora, Jesús me ha seducido, no el mundo y sus engaños y viviré cada día de mi vida sabiendo que Dios merece toda la gloria y la honra y que si eso significa negarme a mi mismo, lo haré con gozo.

Que el Señor me siga ayudando a luchar por un gozo superior que el banal gozo que ofrece este mundo basado en el "si hay amor todo se puede", porque resulta que la única muestra de que si hay amor todo se puede es Jesuristo, que, nos amó hasta la muerte, y muerte de cruz y ahora nos ofrece vida eterna al creer en Su nombre. ¡Dios es siempre fiel!

martes, 25 de agosto de 2015

Debemos aprender a dolernos por nuestro pecado

Hoy, en el colegio, como siempre, me vi tentado de diversas formas. Si bien, obviamente, no caí en hacer algo, sí me inmiscuí en "conversaciones no edificantes" o chistes de doble sentido o cosas por el estilo. Es semana de alianzas en mi colegio, yo y otros tantos compañeros estamos involucrados en algunos bailes. Claro, algunos en hartos y otros, como yo, en apenas el baile de presentación de alianzas (Thriller, disfrazado de spiderman xD).

Entonces, están los deportistas, los de cuerpo atlético y que más encima le ponen bastante empeño en algunos bailes y yo ahí, enfrentado ante la codicia que podía comenzar a surgir en mi mente si no me enfocaba en Cristo. Pero era inevitable, por lo menos si dejaba de confiar en Cristo, que comenzara a ceder a pensamientos lujuriosos. Debía, literalmente, apartar mi mirada, "cortarme el ojo" porque me estaba siendo ocasión de tropiezo... Esa era una de las cosas que me dolían.

La otra era que tengo un compañero que me molesta, como cualquier tipo hetero-no-cristiano, con cosas relacionadas con la homosexualidad: chistes de doble sentido, manoseos, etc... Y entonces, o me reía y simplemente me alejaba respondiendo con un "qué onda loco" o le seguía el juego, sabiendo que amontonaba lascivia y deseos impuros en mi mente. Me avergüenzo de decir que era una mezcla de ambas opciones... En esos momentos mi corazón se divide entre la carne y el espíritu. La carne desea una sóla cosa: fornicación y pecado. El espíritu de mi nueva naturaleza: santidad para glorificar a Dios y permanecer en una comunión gozosa con Él. Y en los momentos en que le seguía el juego a este tipo que se hace llamar mi amigo no debería haber sentido nada más que risa si fuera un tipo sin problemas con su orientación sexual... pero, ¿qué sería de mí si la gente supiera lo que realmente sucedía en mi mente?

Pero entonces, siento que he contristado al Espíritu, y sé que si sigo podría terminar cayendo en algo peor e incluso levantar sospechas de mí a mi compañero y, por lo tanto, me alejo, le hago caso a la mitad de mi corazón dominada por mi nueva naturaleza (la parte confiable) y me voy a otra parte (todo esto en cosa de segundos). Y entonces comienzan los remordimientos, la tristeza, la sensación de por qué a mí y el dolor por mi pecado... la profunda necesidad de oración y restauración de mi comunión con Dios porque he pecado, en mi mente, pero he pecado igual.
"A ti, oh Jehová, levantaré mi alma [...] Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; enséñame tus sendas. Encamíname en tu verdad, y enséñame, porque tú eres el Dios de mi salvación; en Ti he esperado todo el día. [...] Por amor de tu nombre, oh Jehová, perdonarás también mi pecado, que es grande. [...] Mírame, y ten misericordia de mí, porque estoy solo y afligido. Las angustias de mi corazón se han aumentado; sácame de mis congojas. Mira mi aflicción y mi trabajo, y perdona todos mis pecados [...] Guarda mi alma, y líbrame. [...] Integridad y rectitud me guarden, porque en Ti he esperado. Redime, oh Dios, a Israel de todas sus angustias." - Salmo 25
Esas fantasías que se pasaban por mi mente en ambas situaciones, al observar a mis compañeros ensayando sus bailes y en el leseo de segundos con mi compañero eran aborrecibles a los ojos de Dios. Cuán merecedor de condenación soy, pero Dios, conociendo mejor que yo esas cosas que pasaban por mi mente, me amó hasta la muerte, y muerte de cruz, y me ha perdonado y siempre tiene su mano extendida para levantarme y guiarme con su gracia y misericordia eternas. Él es siempre fiel!

Pero ahora, reflexionando, comienzo a pensar acerca de mis hermanos en Cristo: "¿Será que otros no se duelen tanto por su pecado?, ¿acaso un heterosexual, cuando tiene este tipo de pensamientos hacia individuos del sexo opuesto, se dolerá de la misma manera que yo?" Comienzo a pensar acerca de esto producto de tanta cosa que veo en las redes sociales. Sé que las hermanas y hermanos maduros en la fe y también en edad (quizás de unos 25 años en adelante), probablemente tengan claro esto... pero, ¿y si no?. Conozco muy de cerca a algunos que sí la sufren, que le toman el peso a sus pensamientos y a lo importante y causa de gozo que es andar en santidad.

Cómo me dan ganas de tirarle las mechas a una hermana (claro, una inmadura pero de mi edad) que ponga en Facebook algo relacionado con alabar a un hombre por su aspecto físico (en el sentido carnal) o a un hermano que le guste escuchar canciones cargadas de referencias al sexo, como bachatas por ejemplo (y que las publique con vídeo incluido, en dónde aparecen imágenes bastante explícitas). ¿Acaso no se dan cuenta de que de lo que se les pase por la mente también Dios les pedirá cuentas?, ¿hasta cuándo pretenderán agradecerle a Dios por su perdón si aún no se arrepienten de ciertos pecados? Por eso, cuando soy testigo de estas cosas me frustro, porque yo, cuando pienso estas cosas, inmediatamente siento gran dolor y angustia por lo que he imaginado o dicho en mi corazón, pero aquellos parecen ni inmutarse y no sólo eso, tienen la osadía de publicarlo en Facebook. Sí, me duele también el pecado ajeno y cómo leí hace poco en un artículo, eso es una buena señal de que me estoy doliendo "lo suficiente" por mi pecado.

Hay veces que me dan ganas de gritar "Esta es mi lucha, te das cuenta lo difícil que es?! Pero te cuento algo? Eres igual de condenable que yo, pero no haces nada por dejar ese pecado que te tiene encadenado!!!"

Por otro lado me siento feliz de dolerme en este aspecto, de llorar (en sentido figurado y pocas veces literal) por mi pecado, porque me guía a un arrepentimiento casi inmediato y a correr hacia el trono de gracia, donde me gozo en el infinito amor de nuestro Padre Celestial, que me ha escogido sabiendo el desastre que iba a ser, pero sabiendo también que Él será fiel para terminar la obra que ha comenzado en mí, que aunque a veces parezca que nunca lo superaré, Jesús mismo me dará las fuerzas para seguir adelante mediante su Espíritu que vive en mí.

En conclusión: Debo seguir orando para dejar estas batallas en mi mente delante del Señor, para que Él siga obrando y dándome fuerzas y sabiduría para alejarme de aquello que me tienta cuando corresponda, para aplicar la llamada "amputación radical". Debo seguir llenándome día a día de Su palabra, de Su presencia en oración, porque sólo permaneciendo en comunión gozosa con Él podré hacerle frente a la tentación cuando venga. Esa molestia que me da al ver a otros hermanos que se relajan de cierta forma con sus pensamientos surge de un amor que el Señor a puesto en mí de dolerme del pecado ajeno, en especial si lo están cometiendo mis hermanos en Cristo. Tampoco debo dejar que esa molestia me lleve a fijarme demasiado en el otro, a compararme con otros, porque no es sano en ningún aspecto.
Gloria a Dios por poner en mí el escribir aquí, porque es sano para mi mente, para no dejarme llevar por emociones tóxicas y desahogarme aquí (y así dejar de perder tiempo dándole vueltas y vueltas a las cosas), y también porque sé que quizás esto le sirva a otro compañero de lucha, aunque de todas formas mi objetivo #1 al escribir aquí no es complacer al lector, sino poder expresar mis sentimientos de alguna u otra forma. Gracias Dios! :)

Esto es ser radical

Un mundo que día a día acepta la homosexualidad como algo normal y que si hay amor todo es posible...
Uf, difícil panorama para quienes luchamos contra esta tendencia por amor a Cristo
Tengo recién 17 años y anhelo dejar cosas por causa de Cristo. Mis padres, si bien son cristianos, no son muy entregados por la causa y no comprenden por qué me gusta ir cuantas veces pueda a la iglesia, por qué me carga perder las reuniones de jóvenes o por qué me enojo cuando me hacen faltar a un discipulado
A veces pienso que si supieran mi lucha lo entenderían...

Claro, alguien que no lucha contra un pecado como este puede dejarse relajar en la lucha, si total "las consecuencias son distintas"  pero, lamentablemente el pecado es igual de aborrecible a los ojos de Dios. Un mentiroso, un avaro, un egoísta, un homosexual, todos pecadores merecedores de condenación a los ojos de Dios... Pero todos podemos ser salvados por la bendita gracia de Dios que nos amó desde antes de la creación del mundo y nos escogió

El gran problema es que si no soy radical y no pierdo mi vida por causa de Cristo, si no tomo mi cruz cada día y me NIEGO a mi mismo podría llegar a acostarme con otro hombre... Mientras otros quizás mientan, digan una palabrota o sean un poco egoístas... Triste verdad pero siempre confiaré en que si Dios me permite seguir luchando es porque tiene un plan soberano para mi vida.  Mediante esta lucha está formando el carácter de Cristo en mi, me lleva a ser más misericordioso y mucho menos prejuicioso. Que Dios me siga guiando en su voluntad y me enseñe sus caminos. Después de todo puedo decir: gracias Dios, porque me permites ser radical por ti, para caminar en santidad.

viernes, 1 de mayo de 2015

Nota mental: mi corazón es engañoso y perverso

Son las 4 de la mañana, acabo de caer en tentación. ¿Algún día me libraré de ser tentado a ver pornografía? Gracias a Dios había pasado mas de 1 semana sin ver nada inadecuado.

Este ciclo comenzó el miércoles, luego de haber tenido que ir a hacer un trabajo a la casa de una compañera no muy simpática que digamos. Sin tener mi confianza, suele burlarse de mí o hablar mal de mí a mis espaldas con su grupo de amigas. ¿Será por esto que algún día llegué a una inclinación homosexual, porque siempre hubieron algunas mujeres que se burlaban de mí por razones vanas? Sea como sea, aún tratando de ser fuerte, sus comentarios me llegaban, y me hacían reflexionar cosas malas.

Estando en su casa su hermana pequeña, de unos 6 años, preguntó quién era yo y luego empezaron a molestarla con que yo le gustaba. La niña dijo "nooooo! es feo!"... yo sólo reí... aunque mis compañeras reían con un tono claramente burlesco. Estas cosas son las que me empiezan a dar vueltas en la cabeza y me hacen pensar, equívocamente, que "yo soy así, no cambiaré nunca, una mujer jamás me querrá" (en cuanto a mi inclinación no deseada), siendo que el amor y misericordia de Dios me han transformado mucho ya, cuanto más no podrá cambiarme otro poco.
El colmo fue cuando esperaba la micro en compañía de una compañera que sí es simpática. Detrás había un tipo "atractivo", yo lo miré... lujuriosamente, pero no le di mas vueltas. Luego, mi compañera me dice sigilosamente: "Detrás mío está el medio mino! le hago de todo!" (desde luego, ella no era cristiana)... Ese fue el colmo. ¿Por qué? Porque... maldición, era algo parecido a lo que pensé, jamás lo hubiese dicho, pero lo pensé! Le di vueltas a esa situación todo el viaje a mi casa. Llego, y ¿qué fue lo primero que hice? En ves de ponerme a orar al tiro, porque sabía que estaba con malos pensamientos. Pesqué el netbook y le di un mal uso a la webcam... No caía en eso hace meses. Para más colmo al día siguiente tenía prueba y no había estudiado nada, y gasté casi 2 horas en estar haciendo esa necedad!. Luego, pude sentir el perdón y misericordia de Dios. Y, al día siguiente, no paré de hacer cosas en todo el día y, a pesar del ser el día siguiente feriado, no me metí al pc en la noche (de todas formas llegué tarde a mi casa). Sentí tentación en algunos momentos pero pude sentir que Dios me sostenía.

Pero ayer, viernes, desperté con cierta tentación y no me preparé espiritualmente, ya que me desperté cerca de las 2 pm y a las 5 pm tenía que estar en una actividad misionera de mi iglesia. Fue muy bacán todo lo que se hizo, y a pesar de haber quedado con una gran reflexión, en mi viaje de vuelta a mi casa fui tentado a mirar con lujuria al pasajero que iba sentado delante mío y me costó dejar de darle vueltas. Entonces, durante la noche, fui tentado a ver imágenes sugerentes en facebook, y, a pesar de SABER que tenía que ponerme a orar porque estaba débil (nuevamente los pensamientos de "eres así, no vas a cambiar" me abrumaron) ocupé el tiempo para un trabajo escolar y, ahora, a las 2:30 am, comencé a ser tentado a ver pornografía... Y, en vez de correr a los pies de la Cruz y clamar a Dios por fortaleza... accedí a la tentación como un imbécil, dejando de luchar como me correspondía. El Señor tenga misericordia de mí y me fortalezca. "Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse..." (Pv 24:16)

sábado, 18 de abril de 2015

Diga el débil: Fuerte soy

Luego de una semana sin tantas pruebas, quizás alguna que otra frustración, pero en realidad bastante tentado, pude juntarme con un hermano que me está guiando y ministrando en esta lucha.
Hace bastante tiempo que queríamos juntarnos pero no se había podido dar de tal forma que pudiéramos conversar harto. Fue realmente reconfortante y confrontante.
Dios me venía hablando durante la semana, mediante Su palabra y el ánimo de otro hermano que conoce mi lucha, que debo "esforzarme y ser valiente" (Josué 1:9) y también aprender a decir en mi debilidad: Fuerte soy (Joel 3:10). Pero todo esto tuvo su momento cúlmine en la conversación con este hermano. Doy gracias a Dios porque pude sentir como me confirmaba lo que me venía hablando durante el resto de la semana.

Dije en el post anterior que nos tragamos demasiadas mentiras en nuestras cortas vidas. No me retracto de ello, sin embargo, nuestro problema está en cuando hacemos de esas mentiras nuestra identidad. El mundo puede decirme que soy débil, que soy tonto, que soy cobarde, que soy gay, pero el punto es que eso era antes, ya no puedo ni debo seguir viviendo del pasado.
"De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas." (2Cor 5:17)
Me exhortó a varias cosas este hermano, haciéndome ver que aún hay una parte de mi que se resiste de cierta forma a dejar ir esta tendencia homosexual, haciendo que mi vida se centre mas en ello que en Cristo mismo. Tenemos que perder algo para ganar a Cristo, en mi caso, debo perder (dejar ir el placer temporal que me ofrece), de una vez por todas, esta tendencia homosexual, para así ganar a Cristo. Y sí, ahora recuerdo a Pablo cuando afirma tener razones para gloriarse en su carne, así mismo puedo decir que sí tengo para gloriarme en mi carne: mis logros personales + esta tendencia homosexual que sí sería un motivo para gloriarme en el mundo porque es algo cada vez mas aceptado, sería incluso más aceptado por mis pares jóvenes si diera rienda suelta a esta lujuria...

"Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo. Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol, a fin de ganar a Cristo" (Filip 3:7-8)
El Señor tenga misericordia de mí y siga poniendo en mi tanto el querer como el hacer, para día a día tomar como pérdida esta tendencia homosexual.

También fui exhortado a luchar, luchar y luchar a como diera lugar. Sin yo decirle explícitamente, él cachó al tiro que no estaba luchando con todo, que no estaba siendo radical a la hora de prepararme para la lucha.
Por ejemplo: Antes de salir sabía que en la noche tendría que prender un netbook (por un trabajo escolar) que no había prendido hace meses porque tiene una webcam, y esta me había sido piedra de tropiezo muchas veces. Entonces pensaba dentro de mí: "bueno, tengo que prender este netbook para ver el trabajo... será una excusa para poder codiciar a otros a través de la webcam"... Este tipo de pensamientos me solían venir a la mente con cosas así, y este hermano lo descubrió... quedé expuesto, humillado y preparado para ser transformado. Así fue como me hizo ver que debo ser radical y "amputarme" la mano si me es causa de caída, sino esto no será mas que un círculo vicioso y podrían pasar 3, 5, 10 años y aún seguir estancado en mi crecimiento espiritual.

Me ha ayudado mucho, a dejar de pensar en las experiencias "borderline" homosexuales que tuve en un pasado, y a enfocarme en que el sacrificio de Cristo lo ha vencido todo, y me ha dado una nueva vida, un nuevo corazón con nuevos deseos. Así es como debo día a día hacer morir al viejo hombre con su vieja naturaleza homosexual. Soy débil muchas veces, pero es entonces cuando, en vez de echarme a morir como me ha pasado, puedo decir "Fuerte soy, en Cristo que me fortalece"

Por último, Dios me ha hablado que debo tomar la nueva identidad que me ha dado en Jesucristo. Esto me suele pasar: que he caído en pecado y luego cada palabra de "bullying" que sufro en el colegio me hiere y me hace decaer. No lo había pensado, pero este hermano me hizo ver que es casi como "ok, sí, es verdad lo que dicen, lo merezco, apedréenme". Pero NO, no soy lo que ellos dicen, pueden decirme "ooh que erí tonto, que erí pavo, que erí maric*n, fleto, etc" pero NO soy eso, soy un hijo de Dios comprado a precio de sangre, con un corazón con deseos NUEVOS y por lo tanto debo seguir luchando, luchando, luchando y luchando; y aunque caiga, firme seré restaurado en Cristo Jesús y ya no me adaptaré más a los insultos que puedan llegarme de parte del mundo, no permitiré que afecten mi vida espiritual, no me tragaré más mentiras impuestas por el padre de mentira.

Podré estar débil pero, en mi debilidad clamaré FUERTE SOY EN CRISTO JESÚS, MI SALVADOR :)

lunes, 13 de abril de 2015

Nos tragamos demasiadas mentiras durante nuestra corta vida

Hoy iba a ver un testimonio de un cristiano libertado de la homosexualidad en youtube pero me di cuenta que estaba en inglés y sin subtítulos así que decidí no verlo... Pero leí un comentario en este vídeo que realmente me hizo cuestionarme las cosas y darme cuenta "SÍ! ESO ES EXACTAMENTE POR LO QUE YO PASÉ" y que es probablemente el origen de lo que me llevó a la homosexualidad... de la cuál Dios me esta libertando día a día, santificándome hasta el día de la venida de Jesús :)

El comentario decía esto: "We who became gay, believed a lie. From early childhood onwards, we sucked up one lie after another: we saw ourselves as less worthy and weaker, we remembered some harsh criticism, we thought we were different because we liked a bit different things than our friends. Then we misunderstood the same sex friendship, and through many little things we became gay. We were condemned into homosexuality.
But Jesus, oh Jesus!!! What a healer!! It is GOOD to be free, to be me, with no homosexuality in me. God blessed us immensely!"
Que traducido sería...
"Nosotros que nos volvimos gay, hemos creído una mentira. Desde nuestra temprana infancia, nos tragamos mentira tras mentira: nos vimos a nosotros mismos como menos dignos y débiles, fuimos duramente criticados, pensamos que eramos diferentes porque nos gustaban cosas un poco diferentes que a las de nuestros amigos. Entonces malentendimos la amistad con individuos del mismo sexo, y a través de muchas otras pequeñas cosas nos volvimos gay. Estábamos condenados en la homosexualidad. Pero Jesús, oh Jesús! Qué sanador! Es BUENO ser libre, ser yo, sin homosexualidad en mi. Dios nos bendice inmensamente!" 
Después de esto me puse a ver una prédica que me había mandado un amigo, acerca de la lucha contra el pecado, de Adrian Rogers. Me llegó mucho y la relacioné inmediatamente con el comentario de este hermano.

El diablo, padre de mentira, engañando a toda la humanidad para hacerla caer en pecado. A todos nos ataca de distinta forma. Así es como a nosotros, hombres y mujeres que teníamos gustos distintos a los de nuestros pares en la infancia, empezamos a vernos diferentes a los otros y, mediante otro montón de circunstancias, llegamos a malentender esta relación entre nuestros pares de género... y caímos en la homosexualidad, a causa de tragarnos las mentiras puestas delante por el padre de mentira.

Pero JESÚS es la Verdad, no lo que nos vende el diablo. Y la verdad es que Él nos libra de todo esto.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Ahora mismo han pasado como 2 semanas desde que escribí lo de más arriba (lo tenía en borrador) y el Señor me ha revelado más cosas relacionadas con esto... Y también yo he reflexionado bastante en cuanto a qué mentiras me fui tragando desde pequeño.

A muchos les puede parecer que aún me falta mucho por vivir, pero el punto es que no quiero pasar los mejores años de mi vida perdido en el pecado, quiero entregarle estos años a Dios, para hacer Su voluntad. Y, como jamás he tenido una experiencia sexual concreta, la tentación ha sido, y creo que seguirá siendo, bastante fuerte. Pero pongo todas estas cosas de nuevo en la cruz de Cristo, sabiendo que Él ya venció y que debo poner toda mi fe en ese hermoso acto de redención.

Desde que era un niño, el no ser como mis otros pares eran me fue marcando, al parecer. Uno de los ejemplos mas grandes es que jamás he sido bueno para jugar fútbol, de hecho no me gusta... Y en un país como Chile, donde jugar a la pelota lo es todo para cualquier cabro chico, no jugar a la pelota, es un estigma de "menor masculinidad" (o por lo menos eso quedaba en mi mente). Cuando todos jugaban a la pelota y yo me alejaba, habían niños que me decían "se supone que todos los hombres juegan a la pelota, ¿acaso no eres hombre?" o cosas por el estilo. Obviamente estas cosas calaban en mi conciencia, haciéndome sentir menos y menos masculino.

No tengo el típico perfil de un gay: padres separados, el papá ausente o maltratador, o cosas por el estilo.
Mis padres son cristianos (aunque no muy piadosos, por así decirlo) desde poco antes de casarse. Hijo único de mi madre, el 4to y último de mi padre, así que he sido bastante regaloneado. Mi madre me tuvo alrededor de los 40, así que es MUY sobreprotectora (ahora no tanto, pero igual). Mi padre siempre ha sido muy cariñoso, pero es inseguro a la hora de enfrentar las cosas... no recuerdo cuando fue la última vez que lo escuche decir de corazón "hijo, estoy orgulloso de ti" (cuanto me hace falta en estas circunstancias). Siempre que tenía problemas, acudía a conversarlos con mi madre, porque mi padre nunca ha sido bueno para escuchar. Siento el amor de mi padre... pero no interés en qué cosas me pueden estar pasando.
Como decía el tipo del comentario de youtube, de chico me gustaban cosas un tanto distintas a las que les gustaban normalmente a mis pares de género, en especial el tema de los deportes que siempre ha sido casi una etiqueta de qué tan masculino eres. Esto, se suma al hecho de que, desde chico también, siempre sabía que mi papá deseaba jugar conmigo a la pelota, de celebrar mis goles en un equipo del colegio, etc. Pero no podía porque a mi simplemente no me gustaba... Sentía la frustración de mi padre, y me frustraba a mí el no poder ser lo que él quería de mí. Así es como, en algún momento durante la pubertad, esta inseguridad se "erotizó" y comencé a sentirme atraído hacia otros hombres. Vaya vueltas que da la vida, otra razón más para ser una decepción para mi padre...

Pero ahora puedo decir, "olvidando ciertamente lo que queda atrás,... prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús." (Filip 3:13-14), "...las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas." (2 Cor 5:17). Las circunstancias de la vida me guiaron lentamente a los deseos homosexuales (aumentados por culpa de la pornografía), de la misma forma en que las circunstancias de la vida pueden guiar a un niño a ser, de mayor, un ladrón; en ninguno de los casos se justifica la consecuencia, son pecados iguales a los ojos de Dios, y como cualquier pecado merece un justo castigo. Pero entonces viene Jesús a redimir nuestras vidas, a liberarnos de ser esclavos de nuestros propios deseos, para servirle a Él, sabiendo que es lo mejor para nuestras vidas, pues nada nos llenará jamás tanto como Cristo :)

martes, 31 de marzo de 2015

La primera catarsis del blog...

Esta reflexión la escribí en una libreta anoche, nunca había escrito estos pensamientos que normalmente se me vienen a la mente. Fue entonces que decidí hacer el blog, para poder redactar estas cosas con más seguridad y también poderlas compartir con mis compañeros de rendición de cuentas.
Mis deseos lascivos hacia otros hombres me persiguen... Gracias Señor porque sólo Tú me estás restaurando.
¿Será que alguna vez podré amar a una mujer como Cristo amó a la iglesia y dar todo por ella, la mujer que el Señor me tenga preparado? ¿Podré alguna vez tener una familia, hijos, una esposa, nietos, etc? A veces pienso mucho en el futuro, siendo que quizás para entonces ya podría estar en Su maravillosa presencia...
"Look what a mess we've made of love..." "Mira que desastre hemos hecho del amor" (https://www.youtube.com/watch?v=K7USaV-BbwU)
Aquello que el mundo llama "amor homosexual" no existe. Hemos corrompido el significado del amor, el verdadero sentido que creo Dios. Quizás alguna vez experimenté algo parecido y también caí bajo el engaño de creer que se podía amar en ese sentido... pero miro hacia atrás y me doy cuenta que no son más que deseos lujuriosos. Eso es, nada más. Por eso las parejas homosexuales no duran, es cosa de ver los testimonios de quienes pasaron por el mundo gay, un lugar que siento a diario la tentación de conocer. No duran porque pretenden satisfacerse con ello, "necesito esto para ser feliz", pero quedan más vacíos que antes y siempre buscan más y más, hasta tocar fondo.
"The higher I get, the lower I'll sink..." (https://www.youtube.com/watch?v=Kfa3iZjWWWg)
Pero, ¿qué hay del heterosexual? ¿No es, aquél hombre lujurioso, igual de pecador? ¿Qué hay del ateo que tiene una pareja a la que ama con todo su ser pero Dios no está en el centro? Los juzgará de la misma manera que a una pareja homosexual que afirma "amarse".
"Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios." (Marcos 10:18)
Todas las relaciones humanas están corrompidas desde la caída del hombre. "Pues no hay justo, ni aún uno": Él juzgará a heteros y a homosexuales por igual.
Ser heterosexual no te hace agradable a Dios, así como tampoco ser homosexual.
Cuan glorioso es Su amor que no le importó mi condición, mi tendencia para llamarme a Su glorioso Reino. Ha tenido misericordia de mí, el más pecador de entre los pecadores. Es una lucha, pero Él me proveerá de la fuerza. De todas formas, ya ha vencido, hace 2000 años en la cruenta Cruz. Alabado sea Su Nombre Santo... Su plan Soberano es...